La verdad, en esta época que vivimos hay personas que empiezan a desconfiar de los reclamos masivos del tipo “detox food”, “slow living”. El lema que empieza “keep calm because…”, ¿no está ya muy gastado? … Por eso bienvenido Mercurio cuando te pones a retrogradar, si con esta inversión de la corriente habitual del pensamiento concreto nos sirves para revisar también estos conceptos y ver cuánto hay en ellos de fórmula liberadora y cuánto de publicitaria. Con casi 9 años en el sector del marketing, os puedo decir que huele a lo segundo de lejos. Ya no se pueden camuflar entre nuestras afirmaciones positivas sin sonar a vieja fórmula, una vertiente más de consumo, disfrazada de “despertar de conciencia”. Yo me he plantado. Será Mercurio ….
Esta retrogradación de Mercurio en Capricornio, iniciada el 19.12 y que durará hasta Reyes de 2017 reproduce inusualmente un patrón análogo al año pasado por estas fechas. Al igual que entonces, “barre” a Plutón en su viaje de ida, vuelve a tocarlo en conjunción exacta en su retrogradación, y viaja finalmente de ida ya en movimiento directo. Esto es: vuelve a tocar en tres ocasiones al gran catalizador de las transformaciones al estilo “todo o nada”, el gran Plutón. ¿A alguien le suena este tipo de energía de hace un año? Con el sol acompañando, parece que estas transformaciones a las que nos veremos obligados muchos de nosotros liberan de una especie de túnel en el que puede que nos hayamos sentido aquellos a quienes esta conjunción Sol-Plutón-Mercurio (retro y directo) nos haya tocado puntos sensibles de la carta. En mi caso, el Ascendente, bingo.
Más que a renovación de un ciclo, huele a comienzos de uno completamente nuevo. Con la energía puesta en movimiento en el cosmos, da la impresión de que estos 20 días de Mercurio recorriendo en varias pasadas por Capricornio son sólo un “ensayo” de lo que viene para el año próximo: es fácil que muchas personas sientan una imperiosa necesidad (Plutón, fuera del control de uno, ajeno a la voluntad) de transformar su mundo, redefiniéndolo sobre unos cimientos nuevos, si no plenamente, renovados en profundidad (estamos en Capricornio y su regente Saturno así lo indica, además haciendo semisextil a estas 3 fuerzas planetarias que estamos analizando en este post).Reconoceremos bajo una nueva luz a nuestra realidad, y comenzaremos a ser más fieles a nosotros mismos, congruentes con la transformación que cada uno vivirá en distinto grado en 2017. El 21 de diciembre cambiamos al solsticio de invierno. Una fecha sensible tradicionalmente todos los años porque implica cambio en un signo cardinal de tierra (Capricornio). El final de 2016 es más que el final de un año, en esta ocasión es especial porque implica simbólicamente el final de algo mucho más radical: el caos que ha marcado energéticamente este año. Por eso esta Nochevieja tiene algo de radical: allí donde la pasemos, con quién y cómo, nos dirá mucho de cómo viviremos los próximos meses porque Mercurio retrogradando en Capricornio, el eje del solsticio de invierno, hemos dicho cómo nos hará redefinir nuestro mundo suscitando preguntas internas del tipo: ¿Y cómo he llegado hasta esta situación? ¿Cómo he permitido que llegara tan lejos y no me he dado cuenta o no le he puesto remedio antes? Durante los 3 meses siguientes, las respuestas te serán reveladas por la misma voz interna que te las pregunta. O por algún acontecimiento externo que simplemente te dará las claves, depende de tu carta natal propia).
No parece que estas fechas navideñas inviten a ser especialmente alocadas o frívolas precisamente: Saturno en Sagitario hace que se imponga la verdad sobre las cosas, es fácil que la evasión y euforia propia de los excesos en los festejos o bien no apetezca tanto, o bien tenga efectos algo incómodos. Mercurio retrógrado conjunto a Plutón cuadrados ambos a Júpiter y Urano: imprevistos, nervios (ambiente electrificado), excesos que traen remordimientos o que nos vienen a complicar la vida… ¿Invitados inesperados en casa? ¿Traspapelaste el décimo de lotería premiado con la pedrea con lo bien que te venía? ¿Con una copa de más metiste la pata diciendo lo que no debías a quien no debías? Ejem, me contáis en enero vuestras «incidencias» navideñas…
Al mismo tiempo, estos días navideños Júpiter en Libra opuesto a Urano en Aries trae a las reuniones y dinámicas de grupo la típica situación de: “Te sonrío cuando en realidad no te puedo ni ver delante”. Nadie se alarme, esto está a la orden del día pero cuidado con el cinismo propio y ajeno. Recomendamos no dar cuerda a ese reloj, trae desajustes temporales (te saca de tu rueda evolutiva, vaya, cambia la velocidad de tus avances, deja tu saldo de riqueza inmaterial en negativo). Ya que te ponemos sobre aviso, no te desgastes andando por esas bajuras y aprovecha esta energía planetaria para elegir conscientemente el camino de la autenticidad. Revisa tus alianzas, para distinguir la verdad que hay en ellas y cuida a la gente que se alinea con tus principios e ideales, que comparte misión en la vida contigo (en el sentido de percepción y sensibilidad). Las águilas no vuelan con las palomas, cada una tiene su hábitat, su cota de altura propia.
En fin, siente el potencial, mantente firme en la vibración cambiante y caótica de estas fechas este año y prepárate a fondo. En 2017 viene un nuevo despertar similar al de hace años con Urano entrando en Aries. El velo de Maya se descorre para más gente cada vez. Feliz umbral. Mis mejores deseos y sueños para el año que viene. Que disfrutes con intensidad cada momento que te ofrece la vida y sobre todo que seas feliz, pero sin dejar de ser tú mismo.
Felices fiestas y felices sueños.