Si estás en el hemisferio Norte y miras al cielo en dirección Este aproximadamente una hora antes de la salida del Sol, te cautivará una luz: es Venus y emborracha de belleza.
Ahora podemos verla en su momento más brillante, recién emergida como si fuera el diamante de la mañana.
El miércoles 9 de febrero será su máximo brillo. sin duda un buen broche en el cielo para una importante celebración: todos los planetas están directos ahora mismo: dirección, enfoque, velocidad, claridad para distinguir, descanso tras el intenso trabajo interno de las últimas semanas con la energía introspectiva facilitada por los retrógrados.
Mercurio, Venus y Marte, los tres planetas personales que hablan de nuestra gestión individual de la energía mental, sentimental y emprendedora respectivamente, se dirigen hacia Plutón, el reactivador para formar una conjunción con el penetrante Plutón en Capricornio, ámbito de la excelencia por la vía del mérito y el esfuerzo.
